viernes, 16 de mayo de 2014

Lesiones: Hematoma Subungueal Si tu uña se puso negra después de varios entrenamientos de fondo mirá en esta nota cuál es la solución y cómo podés prevenir para este problema tan frecuente en atletas. ...Para los corredores de fondo es hasta algo normal perder un uña o tener más de una de color negro. Por lo general, comienza a tomar un color negro y luego termina cayéndose dejando lugar a que crezca una nueva.Los atletas que entrenan para larga distancia son las principales víctimas de este traumatismo porque los dedos están en contacto con la parte de adelante del calzado por mucho tiempo. Entrenar por circuito con pendiente también puede colaborar en la aparición de esta lesión cutánea. Por otro lado, en verano puede aumentar la frecuencia de las lastimadura por roce ya que con las altas temperaturas tus pies puede hincharse más y el calzado te irá más apretado. Causas: El término médico para esta lesión de la piel es hematoma subungueal y es producto​​ del roce constante de tu dedo del pie contra la parte delantera de la zapatilla. Lo que sucede es que se rompen los capilares que están debajo de la uña y formándose un coágulo que puede determinar un dolor intenso (por la presión de la sangre) y la caída de la uña. Prevención: Para evitar lastimar tus uñas después de entrenamientos prolongados asegúrate de usar el número correcto para tu calzado de running. Si usás un número más chicos seguramente terminarás padeciendo dolor en tus uñas, sobretodo en la del dedo gordo. Otro efectivo método de prevención es que cortes tus uñas con regularidad y mantengas secos tus pies, al correr con los pies húmedos aumentás la probabilidad de que se formen ampollas y se debilite tu piel. Otro punto fundamental es que uses medias para correr para que el pie no quede en contacto directo con la costura del calzado. Atá bien tus zapatillas que se ajusten a tu pie. Tratamiento: Una vez que tengas una uña del pie negro, lo mejor es dejarlo como está, siempre y cuando puedas manejar el dolor. Para aliviar la hinchazón recostate y levantá la pierna sobre un almohadón, también podés aplicar un poco de hielo para aliviar la inflamación. Si la uña tiene que caerse se caerá sola, no la arranques y tampoco hagas fuerza para que se caiga antes de tiempo. A medida que crezca la nueva uña la otra se irá despegando hasta caer. Si la zona afectada se sigue inflamando con el paso de los días, toma un color rojizo y el dolor aumenta, tal vez esté infectado. En ese caso, te recomendamos que consultes a un médico. .

sábado, 10 de mayo de 2014

EntrenamientoOcho alertas del cuerpo para que descanses Correr de más puede ser un problema. El cuerpo emite alertas para indicarnos cuándo parar .Todos sabemos de la importancia del ejercicio para la vida de la gente. Pero existe una máxima que también se aplica a las actividades físicas: todo exceso hace mal. Hay muchos fanáticos en el mundo del running que se olvidan del valor que el descanso tiene para un mejor rendimiento. Nadie mejor que nuestro propio cuerpo puede decirnos si estamos entrenando de más. Nos da distintos indicios que no siempre son respetados. Acá les ofrecemos ocho alertas del organismo para sacarse las zapatillas y descansar un poco. Interferencia negativa en las actividades cotidianas: El exceso de entrenamiento puede perturbar el desempeño laboral, las relaciones familiares y con los amigos, y otras situaciones cotidianas. No dejes de salir, estudiar o juntarte con amigos sólo por correr un poquito más. Caída de las defensas: Un cuerpo cansado está más susceptible a las enfermedades. Si te resfriás o te enfermás más de lo habitual, puede que sea porque te estás esforzando más de lo que deberías. Fragilidad física: Se abre una ventana para la aparición de lesiones, y el cuerpo pierde la capacidad de atenuar la sobrecarga mecánica. Si corrés de manera exagerada, podés lastimarte y pasar mucho más tiempo de reposo obligado. Trastornos del sueño: Tanto el insomnio como el exceso de sueño pueden ser las señales que indican descansar. El organismo no consigue relajarse o no es capaz de despertar para entrenamientos y actividades cotidianas. Dormir bien todas las noches es fundamental en la vida de cualquiera, incluyendo a los atletas. Falta de motivación o disposición para entrenar: Aunque se trate de un entrenamiento corto, el corredor pierde las ganas de hacerlo. La actividad pierde el sentido y ya no está presente el placer de ponerse las zapatillas y salir a correr. Cambios de humor: Es una de las señales más evidentes. Aumenta la posibilidad de roces y discusiones en el ámbito familiar y en el trabajo. Baja performance: Es otro signo muy claro que el cuerpo envía. La baja en el rendimiento en los entrenamientos se hace evidente por diversos factores, como la fatiga muscular y la desregulación hormonal. Aumento de la frecuencia cardíaca en reposo: Esa señal puede ser un problema. El cuerpo pierde la capacidad de calmarse y ajustar el metabolismo. Si en reposo las pulsaciones son más altas de lo normal, consecuentemente durante la corrida – o cualquier otro esfuerzo físico – se elevará aún más.